Toca cerrar una de las secciones de este 2020. A lo largo de diferentes textos hemos ido parando en las principales épocas del cine bélico. Descubierto la época de los años 40, en plena II Guerra Mundial, o la era dorada de los sesenta. Hemos ido parando en grandes años como 1957, 1970 o el reciente 1998. Hoy toca hacer un pequeño resumen y homenaje al cine bélico del Siglo XXI. El último en llegar, 20 años donde el género ha demostrado gozar de buena salud.
2001
No, no es "Una odisea en el espacio". Pero resulta curioso que casi 20 años después uno se pueda arriesgar a destacar la afirmación de que se trata de uno de los grandes años del cine bélico. Aquel año se estrenaba un intento de pelotazo taquillero como "Pearl Harbor". Pero, tranquilos, el motivo de que este año haya pasado a la historia del género no es tanto por la cinta de Michael Bay, un tanto dilapidada entonces, si no por otros dos títulos que forman parte de la historia del género.
"Blackhawk derribado", de Ridley Scott, posiblemente el mejor film no ambientado en ninguno de los tres conflictos más importantes del género (IGM, IIGM y Vietnam). No mostró con sensacional realismo como fue el combate en las calles de Mogadiscio. Una de cine bélico sobre conflictos modernos todavía sin ser superada. Estuvo presente en la #ligadecinebélico en la que también participaría "Enemigo a las puertas". Un clásico moderno, un Western ambientado en el infierno de Stalingrado, un film europeo con un sensacional Ed Harris. Que ambos títulos hayan estado entre los 11 preferidos de los seguidores de @micinebélico habla muy bien de ese año.
Resto de la década
A pesar del prometedor arranque del Siglo, tenemos que esperar hasta 2006 para toparnos con un regreso a lo grande del género. El doblete que se marcó Clint Eastwood con "Banderas de nuestros padres" y "Cartas desde Iwo Jima" es lo más destacado entre 2001 y 2009. Las dos versiones de una misma batalla, la sangrienta en las arenas de Iwo Jima. La parte japonesa está claramente considerada como la obra superior, pero sin entrar en comparativas, la versión americana con el "affaire" de la dichosa bandera, emblema de los marines, merece todo el honor y respeto.
No obstante en esos años se realizaron numerosas películas bélicas, muchas más que en la década de los 90 donde el cine bélico había quedado abandonado a su suerte. El cine europeo aportó su granito de arena con títulos como "El hundimiento", "Días de gloria" o "Largo domingo de noviazgo", entre otras. Destacar también el drama bélico británico "Expiación", de 2008, que se coló a lo grande en los Óscars siendo nominada a hasta ocho categorías, venciendo en la correspondiente a Banda Sonora. En ella se narraban los hechos de Dunkerque, que en este Siglo estarán presentes en otros largometrajes.
2009
Toca hacer un parón en 2009. Once años después del doblete formado por "Salvar al soldado Ryan" y "La delgada línea roja" llegaría otro doblete en los premios Óscars. El formado por la ganadora "En tierra hostil" y por el western camuflado de cine bélico: "Malditos bastardos". Tarantino nos ofrecía una de hazañas bélicas sin perder la esencia de su cine. Reparto coral, escenas con mucho diálogo, un buen gusto por la música y un tono friki acertado. Un gran resultado que devolvía al mejor Tarantino. Eso sí, como película bélica las hay mejores, pero no cabe la menor duda que repescar el género por parte de un gran director, alegra a quienes amamos este género.
"En tierra hostil" fue dirigida por Kathryn Bigelow. Es, sin duda, la mejor película sobre la Guerra de Irak. Un soldado encargado de desactivar explosivos y la tensión constante de la guerra en una tarea en la que un pequeño error se paga caro. Un yonki de la guerra que no consigue encontrar acomodo en la nueva vida. Seis Óscars lucen en la carátula del DVD de la película, incluyendo película y el de Director, convirtiéndose en la primera (y hasta ahora única) directora en lograr el galardón.
Hasta nuestros días
"War Horse" es una fábula amable de Spielberg que se aleja de "Salvar al soldado Ryan". Pero técnicamente es exquisita, con una fotografía, Banda Sonora y decorados a destacar. También el hecho de que el mismo director que resucitó el cine bélico de la II Guerra Mundial haría lo propio con la Gran Guerra: Un referente.
Los conflictos modernos nos han traído títulos altamente recomendables en esta década. A la cabeza de ellos me gustaría mencionar la muy desconocida para algunos "Beasts of no nation" sobre un conflicto en África, con un espectacular Idris Elba, que lo borda como Coronel de un ejército compuesto por adolescentes. Eastwood recuperaba el género en "El francotirador" con Bradley Cooper como un letal francotirador, y Kathryn Bigelow volvía al conflicto que le dio gloria para narrarnos la búsqueda y captura de Bin Laden en "La hora más oscura".
No obstante la II Guerra Mundial ha seguido gozando de buena salud. A destacar, sobretodo, dos películas que sobresalen de la media. Por un lado el regreso de Mel Gibson a la dirección y al mundillo de Hollywood tras su ostracismo con "Hasta el último hombre", ambientada en la batalla de Okinawa y con un objetor de conciencia (Desmond Doss) interpretado por Andrew Garfield. No se puede dudar de la espectacularidad en las escenas bélicas, marca de la casa.
Lejos de ese realismo bélico se situaría "Dunkerque". Christopher Nolan hizo un chupito de película, que apenas alcanza los 95 minutos, y jugando con el montaje genera tensión mostrándonos una manera diferente de contarnos la historia. Sin necesidad de un gran reparto, pero sí amplio, el director de la Trilogía de "El caballero Oscuro" dio en el clavo hasta el punto que la Academia, hasta entoncs reacia a nominar a uno de los mejores directores de este Siglo, acabó por verse obligada a incluirlo en la competición. A destacar la Banda Sonora de Hans Zimmer y el mencionado montaje.
Por último, toca destacar la última gran película bélica del Siglo XXI y, posiblemente para muchos, la mejor de todas ellas. En 2020 llegó a las pantallas (aunque su estreno fue en diciembre de 2019) "1917". Sam Mendes nos recuperaba la Primera Guerra Mundial con maestría. El plano secuencia casi ininterrumpido (sólo un corte es notorio, a mitad de la película) denota el mimo y el trabajo que hubo detrás de un film que arrasó en los premios importantes de la carrera de los Óscars: Globos de Oro, Bafta, PGA, DGA... pero que a la hora de la verdad sucumbiría ante el fenómeno coreano "Parásitos".
Esta historia del género no concluye aquí. Esperemos que con el paso de los años, otros títulos que estén por llegar formen parte del imaginario colectivo. Que en la historia del cine bélico haya hueco (que lo habrá) para nuevas producciones. Si algo demostró Spielberg fue que se le podía dotar ese realismo que Sam Fuller pedía a gritos... Y si algo han mostrado Nolan o Mendes es que se puede jugar con las reglas y formar una nueva manera de crear cine bélico. Que así siga siendo.
2001
No, no es "Una odisea en el espacio". Pero resulta curioso que casi 20 años después uno se pueda arriesgar a destacar la afirmación de que se trata de uno de los grandes años del cine bélico. Aquel año se estrenaba un intento de pelotazo taquillero como "Pearl Harbor". Pero, tranquilos, el motivo de que este año haya pasado a la historia del género no es tanto por la cinta de Michael Bay, un tanto dilapidada entonces, si no por otros dos títulos que forman parte de la historia del género.
"Blackhawk derribado", de Ridley Scott, posiblemente el mejor film no ambientado en ninguno de los tres conflictos más importantes del género (IGM, IIGM y Vietnam). No mostró con sensacional realismo como fue el combate en las calles de Mogadiscio. Una de cine bélico sobre conflictos modernos todavía sin ser superada. Estuvo presente en la #ligadecinebélico en la que también participaría "Enemigo a las puertas". Un clásico moderno, un Western ambientado en el infierno de Stalingrado, un film europeo con un sensacional Ed Harris. Que ambos títulos hayan estado entre los 11 preferidos de los seguidores de @micinebélico habla muy bien de ese año.
Resto de la década
A pesar del prometedor arranque del Siglo, tenemos que esperar hasta 2006 para toparnos con un regreso a lo grande del género. El doblete que se marcó Clint Eastwood con "Banderas de nuestros padres" y "Cartas desde Iwo Jima" es lo más destacado entre 2001 y 2009. Las dos versiones de una misma batalla, la sangrienta en las arenas de Iwo Jima. La parte japonesa está claramente considerada como la obra superior, pero sin entrar en comparativas, la versión americana con el "affaire" de la dichosa bandera, emblema de los marines, merece todo el honor y respeto.
No obstante en esos años se realizaron numerosas películas bélicas, muchas más que en la década de los 90 donde el cine bélico había quedado abandonado a su suerte. El cine europeo aportó su granito de arena con títulos como "El hundimiento", "Días de gloria" o "Largo domingo de noviazgo", entre otras. Destacar también el drama bélico británico "Expiación", de 2008, que se coló a lo grande en los Óscars siendo nominada a hasta ocho categorías, venciendo en la correspondiente a Banda Sonora. En ella se narraban los hechos de Dunkerque, que en este Siglo estarán presentes en otros largometrajes.
2009
Toca hacer un parón en 2009. Once años después del doblete formado por "Salvar al soldado Ryan" y "La delgada línea roja" llegaría otro doblete en los premios Óscars. El formado por la ganadora "En tierra hostil" y por el western camuflado de cine bélico: "Malditos bastardos". Tarantino nos ofrecía una de hazañas bélicas sin perder la esencia de su cine. Reparto coral, escenas con mucho diálogo, un buen gusto por la música y un tono friki acertado. Un gran resultado que devolvía al mejor Tarantino. Eso sí, como película bélica las hay mejores, pero no cabe la menor duda que repescar el género por parte de un gran director, alegra a quienes amamos este género.
"En tierra hostil" fue dirigida por Kathryn Bigelow. Es, sin duda, la mejor película sobre la Guerra de Irak. Un soldado encargado de desactivar explosivos y la tensión constante de la guerra en una tarea en la que un pequeño error se paga caro. Un yonki de la guerra que no consigue encontrar acomodo en la nueva vida. Seis Óscars lucen en la carátula del DVD de la película, incluyendo película y el de Director, convirtiéndose en la primera (y hasta ahora única) directora en lograr el galardón.
Hasta nuestros días
"War Horse" es una fábula amable de Spielberg que se aleja de "Salvar al soldado Ryan". Pero técnicamente es exquisita, con una fotografía, Banda Sonora y decorados a destacar. También el hecho de que el mismo director que resucitó el cine bélico de la II Guerra Mundial haría lo propio con la Gran Guerra: Un referente.
Los conflictos modernos nos han traído títulos altamente recomendables en esta década. A la cabeza de ellos me gustaría mencionar la muy desconocida para algunos "Beasts of no nation" sobre un conflicto en África, con un espectacular Idris Elba, que lo borda como Coronel de un ejército compuesto por adolescentes. Eastwood recuperaba el género en "El francotirador" con Bradley Cooper como un letal francotirador, y Kathryn Bigelow volvía al conflicto que le dio gloria para narrarnos la búsqueda y captura de Bin Laden en "La hora más oscura".
No obstante la II Guerra Mundial ha seguido gozando de buena salud. A destacar, sobretodo, dos películas que sobresalen de la media. Por un lado el regreso de Mel Gibson a la dirección y al mundillo de Hollywood tras su ostracismo con "Hasta el último hombre", ambientada en la batalla de Okinawa y con un objetor de conciencia (Desmond Doss) interpretado por Andrew Garfield. No se puede dudar de la espectacularidad en las escenas bélicas, marca de la casa.
Lejos de ese realismo bélico se situaría "Dunkerque". Christopher Nolan hizo un chupito de película, que apenas alcanza los 95 minutos, y jugando con el montaje genera tensión mostrándonos una manera diferente de contarnos la historia. Sin necesidad de un gran reparto, pero sí amplio, el director de la Trilogía de "El caballero Oscuro" dio en el clavo hasta el punto que la Academia, hasta entoncs reacia a nominar a uno de los mejores directores de este Siglo, acabó por verse obligada a incluirlo en la competición. A destacar la Banda Sonora de Hans Zimmer y el mencionado montaje.
Por último, toca destacar la última gran película bélica del Siglo XXI y, posiblemente para muchos, la mejor de todas ellas. En 2020 llegó a las pantallas (aunque su estreno fue en diciembre de 2019) "1917". Sam Mendes nos recuperaba la Primera Guerra Mundial con maestría. El plano secuencia casi ininterrumpido (sólo un corte es notorio, a mitad de la película) denota el mimo y el trabajo que hubo detrás de un film que arrasó en los premios importantes de la carrera de los Óscars: Globos de Oro, Bafta, PGA, DGA... pero que a la hora de la verdad sucumbiría ante el fenómeno coreano "Parásitos".
Esta historia del género no concluye aquí. Esperemos que con el paso de los años, otros títulos que estén por llegar formen parte del imaginario colectivo. Que en la historia del cine bélico haya hueco (que lo habrá) para nuevas producciones. Si algo demostró Spielberg fue que se le podía dotar ese realismo que Sam Fuller pedía a gritos... Y si algo han mostrado Nolan o Mendes es que se puede jugar con las reglas y formar una nueva manera de crear cine bélico. Que así siga siendo.
Muy bien e blog. las mejores peliculas belicas para mi son aquellas que no destacan la ineficiencia de un bando y la superioridad del otro. Black Hawk Down es muy realista concuerdo que es buena. El resto son demasiado norteamericanas. Las de Eastwood en el Pacifico son muy buenas. La linea roja es buena. Hay una tendencia actual a contar sucesos reales lo cual es muy agradable. Gloriosos bastardos no me gusto para nada. Pero se destaca el actor que hace de Aleman . Es sobresaliente. Suerte con el bog. Muy interesante.
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