La película, dirigida por J.Lee Thompson apenas un año después de su mayor pelotazo ("Los cañones de Navarone") está basada en una novela famosa y nos mete de lleno en un conflicto poco tratado en el cine, con los cosacos de protagonistas y su lucha para expulsar a los polacos de Kiev.
Una introducción modélica y sin miramientos nos mete de lleno en el 'fregao'. Primero, con la voz en off ubicándonos poniendo en el mapa a los diferentes agentes, con los polacos pidiendo ayuda a los cosacos para acabar con los invasores turcos; después de esta acción, los traidores polacos atacarán a esas pobres gentes nómadas que habitan en las estepas, propiciando su disolución.Pero el bueno de Taras Bulba no olvida, y veremos crecer a sus dos hijos, uno de ellos interpretado por Tony Curtis (primer nombre en los créditos) siendo inculcados del odio a lo polaco, algo que se acrecentará en ellos cuando vayan a la Universidad a Kiev donde convivirán con polacos que les menosprecian.
Toda la trama viene condimentada con una clásica historia de amor, en este caso del hijo interpretado por Curtis y una bella polaca, y que será determinante en el desenlace de la película, si bien no aporten en lo que viene siendo el aspecto histórico ni su desenlace en cuanto a la presumible victoria de Taras Bulba y los suyos.Con buen pulso, y un montaje que nos hace ameno el viaje, "Taras Bulba" tiene algún pequeño fragmento más humorístico (de la época), pero viene a ser una buena historia sobre el patriotismo cosaco y su modo de vida, con un tramo para el amor y otro claramente para el combate. Más allá de su inicio frenético y a la idea, cabe destacar sus últimos 30 o 40 minutos, con el asedio a Kiev.
Es ahí donde queda justificado el pago de la entrada de cine (quienes la viesen en los sesenta) con los polacos resguardándose tras las murallas ante la sorprendente acometida cosaca. El hambre, ante el sitio enemigo, se apoderará de la ciudad al igual que la Peste, muy de boga en la época, propiciando el desenlace con la escena táctica donde el factor sorpresa hará lo suyo para acabar con el enemigo."Taras Bulba" acaba siendo un más que entretenido film sesentero de cine épico donde el esplendor del Péplum ya va a menos y se nota presupuestariamente. Pese a ello hay escenas donde se ve la magnitud de extras a caballo —como en la persecución final— necesarios. Con un reparto con dos nombres de bastante peso en la época, la producción cumple su propósito y, si bien dista de ser una de las grandes del cine histórico o épico, acaba siendo una buena película sobre un conflicto rara vez tratado.
Nota: 6'25
Lo bueno: Que su duración y montaje facilitan su digestión.
Lo malo: Le falta esplendor y más chicha para acabar siendo memorable, pese a tener mimbres para ello.
Comentarios
Publicar un comentario