Por ello, y para dedicarle alguna entrada en el blog, he querido recopilar los principales títulos que han surgido y mencionarlos aquí. Vaya por delante que, posiblemente, el hecho de no querer poner a británicos como enemigos, cuando han sido históricamente aliados y ha habido mucho cine con directores, actores o productores de las islas implicados, haya tenido que ver. Eso y el fracaso estrepitoso que supuso una de las películas que a continuación mencionaré.
En la era del cine mudo encontramos las primeras muescas del cine sobre la Guerra de Independencia. El cine en pañales, pero uno de los grandes nombres propios de EEUU, DW Griffith rodó en 1924 "Amerika", película que tenía la Guerra de Independencia como telón de fondo. Griffith ya había tocado la Guerra de Secesión en "El nacimiento de una nación", su obra cumbre (con permiso de "Intolerancia"). Dentro del cine mudo se podría rescatar también "The heart of a hero" que narraba las peripecias del espía Nathan Hale.Ya en la era del sonoro, y contemplando que centraré esfuerzos en un puñado de títulos y no en mencionarlos todos (si bien la lista excluyendo cortometrajes y mediometrajes es muy corta) iremos a la época previa y posterior a la II Guerra Mundial. ¿El motivo? En 1939 y 1947 se produjeron las dos grandes películas sobre la Guerra de Independencia USA. La primera de ellas, como no podía ser de otra manera, con sello John Ford. Se trata de "Corazones indomables", protagonizada por Henry Fonda y Claudette Colbert. El asunto es que los rebeldes americanos luchaban contra británicos e indios, con lo que la película suele ser incluida erróneamente dentro del Western.
En 1947 otro director amante de lo épico como fue Cecil B.DeMille, estrenaría "Los inconquistables", con Gary Cooper de protagonista. Otra cinta de aventuras donde la Guerra de Independencia no deja de ser más un periodo histórico para una cinta sobre la esclavitud que unos hechos importantes y decisivos para el devenir de la película. Junto a "Corazones indomables" se trata de las dos mejores películas hechas de las que están ambientadas en el conflicto. Entre medias, en 1940 otro amante del cine épico o de aventuras como fue Frank Lloyd dirigió "Pasión de libertad", mucho más dramática que de acción.Nótese que en los años de beligerancia USA vs el eje (1941-45) se evitó el conflicto al centrar esfuerzos en el cine IIGM. Tras "Los inconquistables" llega una época con algunos títulos interesantes pero que es difícil encontrar hoy en día. "Duelo de espías" (1955) tiene el sello de un John Sturges previo a "Los siete magníficos", "El capitán Jones", de John Farrow está centrada en la vida del primer gran héroe de la marina de los EEUU, y en 1959 llegaría "El discípulo del diablo" de Guy Hamilton y con un reparto estelar: Burt Lancaster, Kirk Douglas y Laurence Olivier.
Pero a partir de ahí, nuevamente la nada más absoluta. Desde Francia llegaría "Lafayette" centrada en la vida del oficial francés durante la Guerra de Independencia americana, y podría mencionarse, solo apto para aventureros melómanos, "1776" película musical todada en 1972 y que pretendía narrar el conflicto en clave musical del mismo modo que "¡Oh, qué guerra tan bonita!" Lo hiciese de la Gran Guerra.Nos plantamos entonces en 1985, año en que se realizaría uno de los mayores despilfarros de Hollywood para llevar a cabo "Revolución ". Al Pacino de estrella liderando el reparto (que incluía a, por ejemplo, Donald Sutherland) en una cinta dirigida por Hugh Hudson, que venía de haber tocado el cielo 4 años antes con "Carros de fuego" su primer largometraje. "Revolución" fue un sonado fiasco en taquilla, un fracaso absoluto. La crítica tampoco la dejó en muy buen lugar, resultando ser una película fallida en muchos aspectos. No mala, pero sí irregular y lenta.
"Revolución" fue un fracaso que prácticamente sepultó el escaso cine que se hacía sobre la Guerra de la Independencia USA. Curiosamente, desde entonces apenas ha habido Tv movies con una exitosa excepción: "El patriota". Un director alemán al mando de una película antibritánica con un actor que a día de hoy tiene la nacionalidad irlandesa como Mel Gibson, especialista por entonces a hacer peinetas a los británicos después de petarlo con "Braveheart". La película tiene sus obvias licencias made in USA y propias del cine Emmerich, pero es un entretenimiento que gusta bastante y, visto el panorama, posiblemente la tercera gran película sobre el conflicto. Tuvo un presupuesto de 100 millones de dólares y logró recaudar 215 millones de la época
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