Señalar, al mismo tiempo y a modo de anécdota belicosera que el actor fue una de las primeras ideas que tuvo Coppola para "Apocalypse now". En concreto a McQueen se le ofreció el puesto de Willard (que al final interpretaría Martin Sheen), pero no vio con buenos ojos tener que irse unos meses a la Jungla (y eso que todavía no se sabía que el rodaje duraría 16 meses). Pese al rechazo, el agente de McQueen llegó a ofrecer al actor nuevamente a Coppola, pero para un papel que requería menos días de rodaje, el del Coronel Kurtz, eso sí, pedía la misma cantidad de dinero que le habían ofrecido por ejercer el rol de Willard, de mayor peso en la película. Coppola, obviamente, no accedió.
Con un título tan legionario aquí en España, ya que en su original se titulaba "The war lover" ("El amante de la guerra") se esconde un drama romántico con los tópicos del género. Dos pilotos enfrentados por el amor de una mujer en Gran Bretaña. Los bombardeos alemanes son el principal peligro en el terreno, pero esos dos pilotos tendrán, también, el peligro de sus incursiones sobre Europa en el día a día. Pasable pasatiempo rodado un año antes de su gran película bélica y donde McQueen ya ejercía de piloto, esta vez sí, llegando a pilotar (de manera ficticia) un avión.
Título hoy en día olvidado y obra menor de un director con algunas grandes obras como fue John Sturges, con quién McQueen coincidiría en dos de sus grandes papeles (uno de los cuales, ya sabréis, estará liderando esta lista). La acción nos traslada a Birmania con el bueno de McQueen ejerciendo un rol secundario, pero dando muestras de su saber hacer en pantalla para que la atención se centre en él. Y eso, estando liderando el proyecto un oscarizado Frank Sinatra y una belleza como Gina Lollobrigida es mucho decir. Nuevamente más romanticismo que acción, si bien esta vez el actor no está involucrado directamente en la trama amorosa. Entretenida, pero algo larga.
Es increíble lo olvidada o abandonada a su suerte que está esta "Comando" de Don Siegel. Título sesentero que coge la esencia de películas de la guerra de Corea como "La colina de los diablos de acero" o "La cima de los héroes", películas con un marcado intento de realismo bélico, centradas más en la crudeza de la guerra (pero sin ser puramente antibelicista) o, cuanto menos en la realidad del conflicto, que en hazañas bélicas. Quizás el hecho de ser parida en una década donde las hazañas bélicas estaban a la orden del día y ser un proyecto menor anuló su presencia. Pero estamos ante un interesante relato bélico que merece mejor suerte.
Una nominación al Óscar. Ese es el escaso bagaje de un mito de Hollywood como Steve McQueen. Dicha nominación la logró por esta cinta bélica que alcanza las tres horas, ambientada en un conflicto en China entre la Primera y la II Guerra Mundial. Con Richard Attenborough de acompañante, McQueen nos regala una de sus mejores interpretaciones en esta película de Robert Wise que obtuvo numerosas nominaciones (incluyendo película) a los Óscars. Notable superproducción que, quizás por el conflicto que toca, tampoco ha sido justamente tratada con el paso del tiempo.
¡Qué sorpresa!, ¿Verdad?. No cabe duda de que "La gran evasión" es un hito del cine bélico. De hecho, sin dicho hito no existiría este título a la memoria de McQueen, pues cinco películas es un bagaje escaso para tener dicho honor. Pero su Hilts merecía este homenaje. Por ese guante y esa pelota de beisbol, por la nevera, por todo ese humor, por el licor de patata... y por esa fuga en moto donde, vestido de alemán en un cameo, McQueen se llega a perseguir a sí mismo. Una de las grandes del cine bélico y la película más mítica en la filmografía del gran actor. John Sturges nos regaló una propuesta de aventuras en donde las tres horas que dura se nos pasan volando al estar perfectamente estructurada en tres actos: Presentación-Fuga-¿Libertad?.
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