Crítica de "A descubierto"

Netflix estrenó el pasado 15 de enero "A descubierto", una propuesta de Ciencia Ficción pero que bebe mucho del cine bélico, al menos en su esqueleto. Por ese motivo, he decidido dedicarle una entrada pese a, repito, tratarse de Ciencia Ficción. La trama nos muestra un futuro no tan lejano (unos 50 años después de la caída de la URSS), y nos traslada a Ucrania y a un grupo rebelde dispuesto a anexionar el país a Rusia de nuevo. En medio de todo el fregado, los EEUU, y sus tropas donde se incluyen robots.

Cabe destacar de la propuesta el inicio demoledor que nos pone al día de lo que tenemos que ver, y de como es el personaje principal (interpretado por Damson Idris). Un tipo que es capaz de saltarse las órdenes siguiendo corazonadas. Salvará la vida de numerosos militares, "pilotando" un dron, pero por desobediencia (y acabar con la vida de dos de ellos) será condenado a servir a infantería.

De esta manera sencilla, Mikael Häfström nos pone alerta sobre las guerras modernas. Desde un dron, desde una base en Nevada, con apenas apretar un botón se pueden sesgar vidas y ganar guerras. Tenemos esos artilugios del diablo en el cielo... y en tierra robots combatiendo, incluido ese híbrido interpretado por Anthony Mackie (Halcón en la saga de los Vengadores de Marvel). Su personaje es el único mínimamente trabajado del proyecto, capaz de sentir como un humano... pero pensar como una máquina.

"A Descubierto" tiene muchas similitudes con la Saga Terminator y, por ello, la mayoría de cosas que vamos viendo, con giros de guión no del todo elaborados, acaban pareciéndonos un clon de algo ya visto. En su afán por ¿criticar? la guerra moderna, la obra nos lanza de poco en poco píldoras suficientes. A destacar el momento en el cuál el personaje principal (Idris) acabará viéndose obligado a disparar a una persona. La sensación que tiene es la de un asesinato. Curiosamente, desde su base en Nevada, cuando sesgaba vidas, no tenía esa sensación.

Ahí radica la principal crítica a las guerras modernas, al estilo de "Espías desde el cielo", donde somos capaces de disparar a distancia, como si fuera un videojuego. Pero la guerra sobre el terreno, formando parte de la infantería, es otro asunto. La crítica irá mucho más lejos cuando un dron hace estallar todo por los aires. Nuestro personaje sobrevivirá pero contemplará los destrozos que provocan esas armas de fuego en las que había servido.

Quizá resulte forzado, pero la crítica está ahí. Por desgracia, no la llevan al límite. Tras un inicio y un nudo mostrándonos como es la guerra moderna y avisando de que tanta máquina nos matará algún día (Terminator dixit), el discurso se acaba diluyendo cual azucarillo con un final tan torpe como contrario a lo mostrado hasta entonces. No hemos aprendido nada, y los primeros, los encargados de elaborar el guión de la película. Por querer esquivar el amargor del discurso, acaban aceptando un final muy a la americana que no molestará a quienes devoren las palomitas con la propuesta repleta de acción.

En los años 50, la Sci-Fi norteamericana dedicó numerosos títulos a las catástrofes nucleares y al desarme. Y el mensaje final quedaba claramente ligado al pacifismo y a dejar las armas. En "A descubierto" uno tiene la sensación de que los de siempre han ganado y que por mucho que se haya desmadrado el asunto, todo vuelve a su lugar de origen... y podremos seguir evolucionando en armamentística camino de una III Guerra Mundial.

Una lástima que, de esta manera tan torpe, la película caiga en su trampa y acabe abrazando el lado más efectista y populista. A pesar de ello, sale escaldada por un tramo final que baja el ritmo hasta entonces bastante entretenido. Tenemos acción, y una trama que, sin ser destacable, es lo suficientemente aceptable para un producto de su especie. Quienes quieran entretenimiento fácil, tienen en "A descubierto" un thriller de Ciencia Ficción con amplio enfoque militar/bélico. Se le acaban viendo las costuras, pero por el camino propone un mensaje interesante.

Nota: 5

Lo Mejor: Los discursos y matices antibélicos, por desgracia escasos

Lo Peor: Que al final todo sea una excusa para un viaje típico por el cine con máquinas de guerra.