Proyectos Inacabados: Leningrado (By Sergio Leone)

Sergio Leone no fue un director que tuviera un amplio abanico de películas. Realizó su famosa trilogía del dólar en apenas cinco años y ampliando gradualmente el presupuesto hasta hacer lo que quiso con esa joya que es "El bueno, el feo y el malo". ¿Y después?, posteriormente y hasta su muerte, apenas tres títulos en 20 años, una miseria para un gran director. Y entre ellas, un "Agáchate maldito" (su retorno al Spaghetti Western) que fue su obra más floja sobre el Lejano Oeste.

Era un director que necesitaba tener las ideas claras y todo en orden para hacer una película, y por ello le costaba ponerse a un proyecto y le daba mil vueltas antes de abarcarlo. Algo así sucedió con "Leningrado", su visión de los 900 días de sitio de San Petersburgo (como se conoce hoy a la ciudad), donde el hambre y la resistencia soviética sobre el invasor Nazi eran dos ingredientes muy interesantes para la película.



En lugar de informarse sobre el sitio, Leone abordó de diferente manera el asunto. Escuchó una sinfonía titulada Leningrado, del compositor ruso Shostakovich. De eso y dos fotografías del compositor, en una de las cuales aparecía como bombero, como parte de la resistencia soviética. Lo poco que se sabe del proyecto lo vertió el biógrafo de Leone, que señaló que la obra contendría una historia de amor entre un cámara norteamericano y una joven soviética, con el sitio de fondo, como peligroso protagonista.

Una secuencia que sí habría trascendido es la de apertura, con el actor que haría de Shostakovich tocando el piano, la cámara traspasaría la ventana para, a través de una ciudad en ruinas llegar hasta las trincheras soviéticas, y posteriormente a la estepa donde aguardarían los Panzer alemanes. Todo ello en un plano secuencia ambicioso y (por narices) costoso. Sin duda pone la piel de gallina pensar en lo hermoso de dicha secuencia. Pero nos quedaremos con las ganas.

Nos quedaremos con las ganas porque esta película rondó la cabeza de Leone en los años 80, pero no llegó a materializarse. La idea era rodar allí mismo, en donde tuvieron lugar los hechos. Pero en aquellos años aún estaba la Guerra fría y ninguno de los presidentes soviéticos vio con buenos ojos la apertura a rodar allí. Leone, no obstante, no se escondía en las entrevistas hablando de su idea, de su proyecto... hasta que este se fue apagando.

En 1988 el director italiano llegaría a reconocer acuerdo con diferentes productoras para lanzar el proyecto. Se dice que había prometido a Robert De Niro para el papel principal... pero este negaría que le hubieran ofrecido papel alguno, y el presupuesto de 30 millones que estimaba el director (según fuentes, realmente debería ser mucho más costoso) y los tres años que tardaría entre iniciar un guión que nunca fue escrito hasta ver acabada la película, echaban el proyecto atrás. Pero, sobretodo, la repentina muerte del director en 1989, a los sesenta años. Estaba en conversaciones para, nuevamente, intentar conseguir dinero para su sueño.

Finalmente la película no se vería. El mundo del cine tocó otro de los momentos cruentos de aquella guerra, pero en otra zona: Stalingrado, primero en forma de film alemán (1993), posteriormente con un reparto de estrellas con Jude Law o Ed Harris ("Enemigo a las puertas", 2001) y finalmente con la película rusa de 2013 de título nuevamente "Stalingrado". Por el camino, el sitio de Leningrado solo apareció en pantalla en una producción rusa de título homónimo, con Mira Sorvino o Gabriel Byrne aportando la labor extranjera. La película es una más dentro del amplio abanico de cine propagandístico que el cine ruso ha dedicado a su resistencia durante la II Guerra Mundial.