Tres Reyes

Mañana es Día de Reyes, un bonito día para recordar la última película bélica con cierto prestigio que dio el Siglo XX. Tras años donde el cine bélico había desaparecido, "Salvar al soldado Ryan" y "La delgada línea roja" resucitaron el género en el año 98; un año más tarde llegaría a las salas de cine "Tres reyes", película que hace mención a los reyes magos. Aunque estos, en lugar de traer Oro, lo buscaban.

La frase clave la suelta el cuarto rey en discordia, que interpretaba el también director Spike Jonze, y que se ponía a tararear la canción de "Three Kings". El grupo lo completaban George Clooney al mando, Mark Whalberg como joven con aspiraciones que quiere el dinero a toda cosa, e Ice Cube.


El plan, bien sencillo. Robar lingotes de oro kuwaitíes que tienen en su poder el Ejército iraquí, justo al acabar la Guerra del Golfo (la del año 90, no confundir con la Guerra de Irak). Excusa sencilla para un trepidante film de acción bélica. Todo ello a las órdenes del ahora reconocido (y dos veces nominado al Oscar) David O.Russell.

Respecto a la película, comentar que está bastante lograda. Es un entretenimiento simpático que llega a algo más que al "se deja ver". La pude ver en su momento en el cine, en una época en la que era difícil encontrar cine bélico en las Salas, algo que en los últimos años aunque llegan con cuentagotas, no cuesta tanto.

Ellos, de todos modos, como los reyes que hace mención el título y el día de hoy, al final sí que trajeron Oro, aunque no todo, al Ejército kuwaití. Y, por encima de todo, llegaron a tener una labor humanitaria en todo el desaguisado. Cambiaron sus ideas por un pueblo al que no pertenecían, como buen regalo de navidad.

Violentos de Clooney
Sin duda alguna, la inspiración para el film de O.Russell es "Los violentos de Kelly" (Kelly´s Heroes), film bélico con tintes cómicos dirigido en 1970 por Brian G. Hutton. Sin duda, el original, ambientado en la II Guerra Mundial donde un pelotón liderado por Clint Eastwood se enteraba que los alemanes tenían lingotes de Oro en un banco en un pueblo perdido por Francia, es mucho más interesante.

Clásico indiscutible del género bélico, las casi dos horas y media se pasan volando gracias a un elenco de mercenarios capaces de vender a su madre por ese dinero. Espectacular Donald Sutherland como Oddball, jefe de uno de los tanques que utilizaba el pelotón para lograr su cometido y que es capaz de cambiar todo el dinero logrado por comprarse un Tiger alemán que, en palabras de su segundo, "es una chatarra".

Para la historia, también, esa cancioncilla que les sigue a lo largo de algunos momentos del metraje: "Burning Bridges". Y es que ambos films comparten un buen gusto por la música. Si en los violentos de Kelly está este tema de Mike Curb Congregation que le iba como anillo al dedo (de las mejores canciones escuchadas en un film bélico), en Tres reyes sonaba a todo trapo Beach Boys, Public Enemy o U2.

Comentarios

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *