De ahí ese vocablo, el de "españolada" para definir el film bélico español, raro en su especie. Sin ocultar en ningún momento que se trata de un film patrio dedicado a l@s militares españoles que se dejaron la vida en tierras afganas, nos muestra un hecho basado en hechos reales donde una teórica operación de rescate acaba siendo una odisea de unas cuantas tensas horas, debido a la imperiosa necesidad de rescatar, además de a soldados españoles, un helicóptero.
Como si de "Blackhawk derribado" se tratara, ya desde ese plano inicial de un helicóptero sobrevolando el desierto, hasta esa -quizás un tanto cómica- secuencia del aparato volcando una vez en tierra, las reminiscencias al cine bélico moderno se suceden. Quizás por la cercanía con Afganistán se pueda parecer más a "El único superviviente", con la que comparte el conflicto bélico, entre otras cosas.
Apenas es hora y media, pero se basta y se sobra para contarnos los hechos sin pararse en moralinas ni segundas intenciones. Más allá de algunos toques al clásico veterano a punto de retirarse que abundan en el mundo del cine y a un amago de "¿por qué estamos luchando?, la realidad es que "Zona hostil" no nos quiere hacer pensar sobre qué pintaba allí o no el Ejército español. Todo lo contrario, quiere rendir homenaje a los que combatieron.
Hace esto último, de la mejor manera que se puede hacer, con un film que tiene todo el espectáculo del cine americano. Con secuencias bélicas logradísimas que merecen más de un aplauso. Martínez y su equipo se ha tomado muy en serio, y con muchas molestias, el film. Y lejos de ser un cutre tributo de los que alguno ha habido a lo largo de la historia de España, es quizás la mejor película patriótica que haya hecho el cine español.. Y eso, con más de 100 años de historia del cine, es mucho decir.
Porque "Zona hostil" tiene lo bueno de no poder ser comparada con nada hecho antes en España. Solo en Estados Unidos encuentra sus similares. Y se codea con algunos de esos films de tú a tú, sin envidiar a ninguna de esas películas palomiteras con tiros por doquier donde el ejército es lo más. Era una operación complicada, una misión difícil. Pero se ha logrado, España comienza a tener -y aquí aprovecho para recordar a los últimos de Filipinas que se vieron el año pasado- cine bélico de garantías, capacitado sobradamente para entretener y no caer en el cutrerío típico que antaño salpicaba al cine español.
Eso sí, no todo debían o podían ser alabanzas para la película. Si algo chirria en el film son unas cuantas de las actuaciones secundarísimas, de esas que están para decir par de frases y contextualizar. Aunque los protagonistas principales, quien más quien menos, mantienen un film que a pesar de parecer ir destinado a contarnos los avatares de Ariadna Gil, acaba -como cualquier guerra- sumida en el caos y siendo un film coral donde todos son importantes y tienen su hueco de gloria en la operación.
En definitiva, un entretenido ejercicio que mantiene la tensión y no cae en el aburrimiento. Una obra rara en su especie dentro del cine español, más cercana a Hollywood que supera con buena nota algo que parecía complicado.
NOTA: 6,5
Lo mejor: Que a pesar de caer en los tópicos patriotas, lo hace con una solvencia y elegancia nunca antes vista en el cine español (y en no muchos films extranjeros).
Lo peor: Que el tiempo puede hacerla olvidar dentro del género por no aportar nada nuevo, y dentro del cine español por ser una rareza que nada tiene que ver con los gustos que hay en el país.
Comentarios
Publicar un comentario