El 28 de julio se conmemoró el centenario del inicio de la "Gran Guerra", que con el tiempo pasaría a denominarse I Guerra Mundial. Supuestamente iba a ser la guerra que terminase con todas las guerras. Sin embargo el tiempo quitó la razón, ya que este mismo año, allá por septiembre, tocará conmemorar el 75 aniversario precisamente del estallido de la II Guerra Mundial.
El cine, cuando irrumpió el gigante bélico estaba en pañales. Aún era un recién nacido. Existían ya, por supuesto, los largometrajes, aunque precisamente de la época anterior a 1914 la mayoría de films que se mantienen vivos son precisamente cortos o en su defecto mediometrajes. D.W.Griffith, tuvo su obra maestra "El nacimiento de una nación" precisamente con la contienda comenzada. Aunque ya para entonces tuviera algún film de menor repercusión que alcanzara la duración de un largometraje.
Para hacerse una idea de la repercusión en el cine de la Gran guerra no hace falta irse muy lejos. Como cualquier otro arte, el cine pudo ser un instrumento de propaganda en toda regla, perfectamente utilizable. Y sirvió, por ejemplo, para que en Estados Unidos tomaran conciencia política con un conflicto que les quedaba un tanto lejano.
Griffith, como haría Chaplin, intentó poner de su parte para que los Estados Unidos tomaran partido del lado anglosajón -y francés-. El cine en el país galo, por ejemplo, perdería enteros durante la contienda. Los creadores del cinematógrafo, Pathé, que por entonces era un gigante de hacer films... Meliés... Francia tuvo un arranque prometedor en el Cine, con mayúsculas. Pero la guerra no entiende de artes.
Aunque el cine bélico se descubrió tiempo atrás, con la guerra de los Boers en China o con el conflicto cubano, más centrado en pequeños documentales que en películas. La I Guerra Mundial sirvió, sin lugar a dudas, de acicate, relanzó el género y le dotó de mayor sentido. Una guerra tan cercana en el tiempo que serviría para ser narrada.
Al contrario de lo que pasaría con la II Guerra Mundial, de donde se guardan y recuerdan films rodados precisamente en pleno conflicto, la época que abarca 1914-18 queda un tanto desasistida en ese aspecto. No hace falta más que ponerse a rebuscar en una página como www.filmaffinity.com para darse cuenta de ello.
Buscando por género "bélico" en los años 1914 y 1918 nos encontramos con únicamente 17 resultados, de los cuales en su mayoría hace mención a guerras antiguas como la italiana "Cabiria" posiblemente uno de los primeros largometrajes con conflicto bélico de por medio, mientras que en el periodo 1939-45 nos topamos con hasta 226 resultados, muchos más, sin duda alguna, aunque alguno pudiera hacer mención a guerras pasadas.
En el aspecto que nos atañe, el de la I Guerra Mundial podríamos estar hablando de que el primer largometraje propiamente dicho que se centrara en dicha contienda de lleno y aun a día de hoy se mantengan copias fáciles (un poco) de adquirir sea "Juana de Arco" de Cecil B. De Mille.
Pero sin duda alguna, el film rodado durante la contienda que más repercusión puede haber tenido, posiblemente por su autor, sea "Corazones del mundo" de D.W.Griffith. Posiblemente a lado de sus grandes obras sea una menor, pero el director norteamericano se metió de lleno en un film bajo beneplácito de Inglaterra que le dejó viajar a Francia en plena contienda.
De hecho se mantienen imágenes del director en las trincheras, que fueron incluidas a modo introductorio en el film. Para Griffith aquello era un tanto aburrido en cuanto a gloria. Poco se podía hacer para ser fiel a la contienda si se quería hacer algo que entretuviera al público. El resultado sería un interesante y entretenido film germanófilo en el que los alemanes son realmente unos despiadados villanos que invaden un pueblo para tiempo después perderlo de manos de los aliados, los buenos.
Como si de una película de indios y vaqueros se tratase. Griffith fue padre del montaje cinematográfico. Contaba batallitas, hazañas... historias, con amor de por medio. "Corazones del mundo" era su granito de arena a la I Guerra Mundial. Copió sus bases de otros films pero a menor escala en cuanto a duración y con ello sentó las bases del cine bélico, prácticamente sin pretenderlo. Muchas películas beberían de la manera de contar batallitas de Griffith.
El cine, cuando irrumpió el gigante bélico estaba en pañales. Aún era un recién nacido. Existían ya, por supuesto, los largometrajes, aunque precisamente de la época anterior a 1914 la mayoría de films que se mantienen vivos son precisamente cortos o en su defecto mediometrajes. D.W.Griffith, tuvo su obra maestra "El nacimiento de una nación" precisamente con la contienda comenzada. Aunque ya para entonces tuviera algún film de menor repercusión que alcanzara la duración de un largometraje.
Para hacerse una idea de la repercusión en el cine de la Gran guerra no hace falta irse muy lejos. Como cualquier otro arte, el cine pudo ser un instrumento de propaganda en toda regla, perfectamente utilizable. Y sirvió, por ejemplo, para que en Estados Unidos tomaran conciencia política con un conflicto que les quedaba un tanto lejano.
Griffith, como haría Chaplin, intentó poner de su parte para que los Estados Unidos tomaran partido del lado anglosajón -y francés-. El cine en el país galo, por ejemplo, perdería enteros durante la contienda. Los creadores del cinematógrafo, Pathé, que por entonces era un gigante de hacer films... Meliés... Francia tuvo un arranque prometedor en el Cine, con mayúsculas. Pero la guerra no entiende de artes.
Aunque el cine bélico se descubrió tiempo atrás, con la guerra de los Boers en China o con el conflicto cubano, más centrado en pequeños documentales que en películas. La I Guerra Mundial sirvió, sin lugar a dudas, de acicate, relanzó el género y le dotó de mayor sentido. Una guerra tan cercana en el tiempo que serviría para ser narrada.
Al contrario de lo que pasaría con la II Guerra Mundial, de donde se guardan y recuerdan films rodados precisamente en pleno conflicto, la época que abarca 1914-18 queda un tanto desasistida en ese aspecto. No hace falta más que ponerse a rebuscar en una página como www.filmaffinity.com para darse cuenta de ello.
Buscando por género "bélico" en los años 1914 y 1918 nos encontramos con únicamente 17 resultados, de los cuales en su mayoría hace mención a guerras antiguas como la italiana "Cabiria" posiblemente uno de los primeros largometrajes con conflicto bélico de por medio, mientras que en el periodo 1939-45 nos topamos con hasta 226 resultados, muchos más, sin duda alguna, aunque alguno pudiera hacer mención a guerras pasadas.
En el aspecto que nos atañe, el de la I Guerra Mundial podríamos estar hablando de que el primer largometraje propiamente dicho que se centrara en dicha contienda de lleno y aun a día de hoy se mantengan copias fáciles (un poco) de adquirir sea "Juana de Arco" de Cecil B. De Mille.
Pero sin duda alguna, el film rodado durante la contienda que más repercusión puede haber tenido, posiblemente por su autor, sea "Corazones del mundo" de D.W.Griffith. Posiblemente a lado de sus grandes obras sea una menor, pero el director norteamericano se metió de lleno en un film bajo beneplácito de Inglaterra que le dejó viajar a Francia en plena contienda.
De hecho se mantienen imágenes del director en las trincheras, que fueron incluidas a modo introductorio en el film. Para Griffith aquello era un tanto aburrido en cuanto a gloria. Poco se podía hacer para ser fiel a la contienda si se quería hacer algo que entretuviera al público. El resultado sería un interesante y entretenido film germanófilo en el que los alemanes son realmente unos despiadados villanos que invaden un pueblo para tiempo después perderlo de manos de los aliados, los buenos.
Como si de una película de indios y vaqueros se tratase. Griffith fue padre del montaje cinematográfico. Contaba batallitas, hazañas... historias, con amor de por medio. "Corazones del mundo" era su granito de arena a la I Guerra Mundial. Copió sus bases de otros films pero a menor escala en cuanto a duración y con ello sentó las bases del cine bélico, prácticamente sin pretenderlo. Muchas películas beberían de la manera de contar batallitas de Griffith.
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