Sin novedad en el frente (Lewis Milestone, 1930)

Cara a los Oscars repasé "Alas" (Wings), de William A.Wellman, que fue la primera película en ganar un Oscar al mejor Film. Hoy toca repasar a la tercera vencedora de la historia de los Oscars, también una película bélica mucho más reconocida y famosa que la anterior. "Sin novedad en el frente", basada en la obra de Erich Maria Remarque y dirigida por Lewis Milestone se llevó los dos premios principales de la gala de 1931 que premiaba a los films de un año antes.

La película narra la vida en las trincheras de un joven idealista alemán: Paul (Lew Ayres) que se alista voluntario junto a un grupo de amigos de la escuela, auspiciados por un profesor patriota como el que más que no tiene ni un solo remordimiento de conciencia en enviar al matadero a los chavales, ya que él siente que es el deber de todo alemán servir a la patria.


Los chicos se alistan y una vez ahí comenzarán un duro entrenamiento previo a la llegada al combate en tierras francesas, donde se unirán a un grupo de veteranos liderados por el Cabo Kat, especialista en encontrar comida en cualquier parte. A partir de ahí "Sin novedad en el frente" es una película sobre la camaradería y los lazos que se hacen en el combate. Poco importa que vayan cayendo amigos, Paul cada vez está más curtido y hecho a la guerra. Sobretodo tras una secuencia en la que queda toda una noche dentro de un agujero en tierra de nadie junto a un francés al que ha dejado moribundo.

Poco a poco sus amigos irán cayendo hasta que finalmente solo quedará él, que herido volverá a casa con un permiso para varios días. Una vez en casa, Paul no se adaptará, algo que ya hemos solido ver en muchas películas. Con su madre enferma, tras largo tiempo ausente, y con su padre y los amigos de éste pensando aún en que la guerra se puede ganar y lo fácil que es mientras miran un mapa y discuten por donde deberán asestar el golpe definitivo a los franceses, todo se le hace duro al joven (o ya no tanto) Paul.

Pero la gota que colmará el vaso será ir a visitar a aquel profesor que le envió a él y a sus amigos a la guerra. Ahí comprueba que nada ha cambiado y el profesor le dice que a sus nuevos alumnos les lance un discurso patriótico para animarles a ir al combate. Paul, que es reacio a hablar, acabará diciendo que viven en las trincheras "intentamos sobrevivir, y en ocasiones morimos". Un discurso más bien pesimista que muestra la realidad de la contienda. Los alumnos no tardarán en tacharle de cobarde.

Una vez vuelto al combate, comprueba como la Compañía a la que pertenecía está compuesta por numerosos jovencillos de menos de 18 años que, en palabras de uno de los veteranos amigos de Paul, "no saben ni llevar el petate. Pero saben morir". Frase dilapidaria que demuestra el final de la Alemania del Kaiser Guillermo. Paul podrá ver a su amigo Kat justo antes de que este muera, a pesar del intento de Paul por llevarle a la enfermería. Y en una última secuencia para la historia, Paul, que es amante de las mariposas, intenta coger una quedando al descubierto y siendo alcanzado por un francotirador francés.

Secuencias
El film de Milestone tiene varias secuencias para la historia. La primera secuencia clave es en la que un profesor patriota ensalza lo bello del combate para animar a sus alumnos a ir a la guerra. Los chicos empiezan a soñar con volver con medallas y gloria, rodeados de mujeres. Todo esto transcurre mientras fuera, por las ventanas, se ve un desfile militar. Una especie de "Gran desfile", como la película de Vidor de 1925 para animar a los jóvenes a combatir.

La siguiente secuencia clave que veremos será la ya tan famosa de "las botas". Uno de los amigos de Paul muere y otro hereda las botas de este. Milestone nos muestra en apenas cuatro planos la muerte de éste y de otro amigo, siempre con las botas como protagonistas.

La secuencia bélica por excelencia del film, donde no paran de caer obuses y sonar metralla, es en la que Paul queda atrapado en un hoyo cuando se retiran de la posición francesa. Poco después a ese hoyo cae un soldado francés al que Paul hiere de muerte. Sin embargo este quedará moribundo gimiendo toda la noche ante la desesperación del soldado alemán. Paul intenta ayudarle, pero ya es tarde. Aún así lanza uno de esos discursos tan famosos hacia la igualdad, señalando que podrían haber sido amigos si no fuera por esos uniformes y que "esta mañana eras mi enemigo".

Como veis, ya tenemos dos pasos clave en la formación de Paul de jóven idealista a adulto. Desde que se alista siendo un chaval, hasta que tras ver morir a sus amigos, mata a un enemigo y se da cuenta que no es diferente a él, que tiene familia. Aun así quedarán otros dos puntos de inflexión en la vida del chaval: La pérdida de la inocencia (o la virginidad) y la desesperación.

Lo primero sucede una noche en la que él y otros dos amigos acaban visitando a unas chicas francesas a las que llevan alimentos. Milestone nos deja intuir absolutamente todo pero sin mostrar nada. En un momento dado no hay nadie en el salón y se ve la puerta de una habitación. Ahí Paul habla con la chica francesa con la que apenas se entienden, ella apenas dice "La guerre". En efecto, la guerra, devastadora y que acaba con todo, ha dado una pequeña tregua a nuestro protagonista poco antes de que quede herido y vuelva a casa.

Y es ahí, en casa, donde llega la desesperación. Otra secuencia para recordar de la película es en la que en la taberna, Paul va a visitar a su padre y a los amigos de éste. Ahí sacan un mapa y se ponen a debatir de como ganar la guerra. Paul llegará a decirles que "la guerra se ve diferente allí" en las trincheras, pero a estos poco les importa, que recalcan el valor de los jóvenes alemanes pero insisten en el discurso patriota de quien combate desde casa. Poco después acontece la ya comentada secuencia de la escuela que acaba siendo detonante para que Paul vuelva a casa cuatro días antes de lo que le tocaba.

Crítica
Aunque ya había recibido un Oscar un par de años antes, "Sin novedad en el frente" es la obra maestra de Lewis Milestone, la película que realizó con mayor mimo y un gran logro en su época en aspectos técnicos. La recreación de la guerra en las trincheras está muy lograda, mostrándonos la tierra de nadie e incluso los pueblos derruidos y los bombardeos.

Ya entrando en aspectos más técnicos tenemos un sonido bastante logrado para la época que nos mete de lleno en el combate. Cuando los personajes sufren los bombardeos escondidos cual ratas en sus búnkeres, podemos ver el miedo en sus rostros y en lo que les rodea. Por si fuera poco, a la hora del combate cabe destacar los barridos de cámara que en el director serían famosos, pero que se iniciaron en esta película.

Enemigos yendo contra las ametralladoras mostrándonos el plano desde el punto de vista de quien defiende la posición, e incluso hay un plano sobrecogedor donde una bomba cae donde un soldado francés y cuando se marcha el humo vemos dos manos agarradas a una trinchera, sin el cuerpo del enemigo a la vista, como una de las primeras secuencias gore que nos dio el cine bélico.

La novela de Remarque tiene el honor de haber sido llevada a la gran pantalla con gran éxito. Milestone no deja nada al azar y la progresión del personaje principal de la novela a lo largo del film es sobrecogedora. Va avanzando paso a paso hasta ser todo un veterano de guerra, para posteriormente bajar los brazos cansado y hastiado de la guerra. Durante un momento del film llegará a decir al soldado francés al que mata que siente cierta envidia puesto que a él "ya no le podrán molestar" al estar muerto. En definitiva, el destino de la guerra.

Milestone dedica su película a los que sobrevivieron al conflicto pero quedaron marcados para siempre. Pero la realidad es que es una película que parece destinada más (y si no, contemplad el plano final con las cruces en un cementerio y la imagen de los jóvenes alemanes marchando al matadero) a dedicarse a todas aquellas víctimas de la guerra, directas e indirectas. Apenas cinco años después de que se estrenara "El gran desfile", pero ya con la llegada del sonoro, Milestone hace buen uso de él para elevar un peldaño más el cine bélico.

"Sin novedad en el frente" es, por lo tanto, una de las pioneras películas antibelicistas de la historia. La crítica a la guerra en general, aunque también a Alemania en particular (si bien los personajes son alemanes, lo cual es otro tema sorprendente) hizo que en la Alemania nazi el film se prohibiera por resultar antigermano. La realidad es que Milestone no nos habla de banderas, ni de culpables directos. Los soldados fueron otros seres inocentes enviados al matadero por los líderes.

El personaje interpretado por Louis Wolheim llegará a decir que la solución a las futuras guerras erra muy fácil. Todos hacían un círculo y dentro ponían a los líderes de los países "ofendidos" en calzoncillos a pelear hasta que uno saliera vencedor. Por desgracia las guerras son al revés... los líderes rodean el círculo mientras dentro se dan de tiros los soldados, pudiendo esas armas atentar como daño colateral a civiles igualmente (o más) inocentes.

Nota: 8,75

Lo mejor: El pulso narrativo de la película, los logros de Milestone con la cámara, desde panorámicas, travellings y los famosos barridos, y el carisma de Louis Wolheim

Lo peor: Que el mensaje del film no sirviera para mucho cuando 9 años después estalló la II Guerra Mundial... y cuando 80 años después el mensaje no ha quedado obsoleto.

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