El último mohicano (Michael Mann, 1992)

Hoy toca ración de cine histórico-bélico y nos vamos a una guerra algo olvidada como la de los siete años (guerras franco-indias) que tuvieron por protagonistas a británicos y franceses luchando por las colonias americanas. Los colonos y los indios nativos combatirían del lado de un bando u otro. Dicha guerra (la de los siete años) tuvo lugar entre 1756 y 1763 (si bien las guerras franco-indias tienen una duración mayor).

El valor histórico de dicho conflicto en el cine ha sido escaso, pero nos ha deparado un ya clásico como es "El último mohicano", una película del género histórico, ambientada en un conflicto armado y que nos vale para continuar en el Continente norteamericano (tras El Álamo y El Patriota). Daniel Day Lewis es la estrella protagonista, y Madeleine Stowe su amada, en esta película cuya BSO pone los pelos de punta, siendo de mis preferidas.

Sinopsis
1757, Guerra de los 7 años (Guerra Franco-india), donde británicos y franceses luchan por las colonias americanas. En la frontera con el río Hudson, conocemos a tres personajes. Nathaniel (Daniel Day Lewis) como le conocen los colonos, el hijo blanco de un indio mohicano, ellos dos junto al hermano de Nathaniel, serán los principales protagonistas de la historia. Los británicos piden ayuda a los colonos para combatir contra los franceses, que también cuentan con ayuda de algunos indios, como es el caso de los hurones.

A un puesto británico llega Duncan Heyward, un inglés con ideas imperialistas que está enamorado de Cora Munro (Madeleine Stowe), hija de un General y cuya hermana también está en dicho puesto. Juntos se moverán al Fuerte William Henry junto a una parte del Ejército británico. Les acompaña un indio mohicano: Magua, que en realidad colabora con los hurones. Magua planea la emboscada para acabar con la vida de las dos mujeres. Tras acabar con todos los británicos menos con Duncan y las dos mujeres, aparecen en escena Nathaniel, su hermano y su padre Chingachgook que les salvan de una muerte segura.

Los seis juntos continuarán su viaje camino del Fuerte para dejar a salvo a las mujeres. Por el camino observarán como los hurones y franceses han acabado con la vida de una familia de colonos que conocían, mientras surgirá cierta relación entre Cora y Nathaniel. Llegarán al fuerte de noche, en medio de una gran batalla, ya que las tropas del General Munro están siendo asaltadas por tropas francesas. Ahí descubriremos que el indio Magua, que colabora con los franceses, quiere ver muerto al General Munro, ya que mató a su familia, y que también quiere acabar con las dos hijas para provocar la extinción de dicha familia.

En el fuerte no hay posibilidad de supervivencia. Nathaniel recomendará a los colonos ir a sus tierras y defenderlas, puesto que mientras luchan del lado de los británicos, son asaltadas sus tierras, algo que a los altos mandos imperialistas les importa bien poco. Cora rechazará a Duncan y acabará teniendo un romance con Nathaniel, en una noche en la que los colonos marchan del fuerte. Nathaniel será acusado de incitar a los colonos para escapar, y será apresado. La dura batalla provoca que haya parlamento entre británicos y franceses. Ahí, el General francés promete a los británicos que les dejará marchar si dejan el puesto. Lo que no saben los ingleses son los planes del indio Magua y los suyos... y que el General francés una vez hayan abandonado el fuerte no moverá un dedo para evitar la masacre.

Por la mañana marchan del fuerte y camino a la libertad serán atacados ferozmente por los hurones. Ahí morirá el General Munro de manos de Magua. Nathaniel y los suyos consiguen escapar salvando a Cora y a su hermana. También Duncan consigue huir y se esconderán en una cueva. Ahí surge cierta relación entre la hermana de Cora y el hermano de Nathaniel. Los hurones, sin embargo, siguen en busca y captura de las mujeres y acabarán dando con ellos. Duncan se queda con las mujeres mientras los indios huyen en busca de munición. Nathaniel prometerá a Cora que sea fuerte, y que la encontrará allá donde la lleven.

Magua y sus indios llegan a donde el gran jefe. La idea es bien sencilla: Quemar a las mujeres en la hoguera (el oficial británico les da igual). Hace acto de presencia Nathaniel para hablar con el gran jefe indio. El jefe indio, inicialmente, da la razón a Magua y quemarán en la hoguera a la hermana mayor, la menor se la llevarán los hurones y el británico se salvará. Nathaniel pide ser intercambiado por Cora, pero Duncan a la hora de traducir exige ser él el sacrificado. El jefe indio accede para mala baba de Magua. Queman en la hoguera a Duncan tras su heroico acto. Nathaniel, desde la distancia, disparará al oficial para que no sufra mientras es quemado.

Todavía queda dar con el paradero de Alice (la hermana de Cora). El hermano de Nathaniel irá en cabeza como un energúmeno para pelear con los hurones y liberar a la joven. Magua acabará con su vida. Víctima de la tristeza y cansada de todo, Alice se tirará por el mismo barranco por el que ha caido el cuerpo sin vida de su recién amado. Atacado por la ira, Chingachgook vengará la muerte de su hijo matando a Magua y acabando con todo. Él será el último de los mohicanos, mientras Nathaniel podrá vivir con su amada olvidándose por un tiempo de la guerra.

Escenas
A pesar de querer dotar de realismo a las escenas del fuerte, no cabe la menor duda de que la fuerza de El último mohicano radica en las emboscadas de los indios. Un aperitivo, en forma de pequeña emboscada nos pone en situación, con Nathaniel y los suyos saliendo al rescate de las mujeres. Pero la mejor escena es la de la emboscada posterior a la rendición británica en el fuerte.

Magua y los suyos merodean en los árboles e inician un ataque despiadado acabando con la vida de los británicos, a quienes cortan las cabelleras. Ahí caerá el General Munro, y Magua le indicará lo que pretende hacer con sus hijas antes de acabar quitándole el corazón al General, que aún estaba vivo antes de dicho acto. Nathaniel, arma en mano, correrá en busca de su amada para huir junto a ella, su hermana y su familia. Una huida que aún tendría la persecución por el río con los indios en canoas.

Por último destacar el final. Escueto, con cierto toque épico en momentos pero que acaba con una batalla final entre Magua y Chingachgook que se salda con victoria del segundo en apenas pocos segundos. La Banda Sonora que acompaña en gran parte del metraje se hará aún aquí más épica al tratarse del clímax final de la película.

Crítica
No estamos ante un film bélico, ni mucho menos. Tampoco ante uno de los hitos del cine histórico. Pero algo tiene "El último mohicano" Que la hace aún hoy en día una más que interesante (y diría notable) película. Michael Mann supo dotar a la historia de amor de su justo protagonismo para que sea una parte importante de la película y lo que mueve a Nathaniel, pero al mismo tiempo que no sea pedante ni cargante.

Al mismo tiempo, las escenas bélicas van sucediéndose en momentos puntuales que hacen que la película no pierda interés en ningún momento. Se trata de una huida, no se sabe bien hacia donde, en todo momento. Menos de dos horas que se pasan volando gracias a la idea de ir al grano en todo momento. No hay escenas de sobra, algo raro en este tipo de cine, ni escenas extendidas hasta la saciedad. Todo está hilado para conocer lo que sucede con los principales protagonistas.

Una historia de amor, con venganza de por medio, con honor y con un toque épico. Todo aderezado con unas imágenes bellísimas y una banda sonora única. Estos dos últimos ingredientes hacen que, por momentos, nos acordemos de un film como "La misión" que también contenía un gran cantidad de imágenes preciosas de paisajes a la par que la BSO (entonces de Morricone) era única y preciosa. Todos estos ingredientes hacen que "El último mohicano" sea una película de esas que se echan de menos y que ya no se hacen.

El único pero que se le puede echar en cara es, precisamente, la otra cara de la misma moneda que acabo de mencionar. El hecho de no alargar ciertas escenas y de ir al grano, de quitar la paja entre medio, es lo que hace que su metraje se adecue más al del cine espectáculo de hoy en día que a ese cine épico made in Hollywood en el que uno espera más escenas de combate, más amor, más venganza y un poco más de todo. El clímax final se pasa en un suspiro por ese montaje acelerado camino al desenlace express sin mantener cierto toque épico. Se mantiene el tono peliculero en parte de ese final, pero ese coitus interruptus que supone esa última batalla saldada en tres guantazos le da cierto toque "diferente" pero, al mismo tiempo, le quita protagonismo a lo glorioso.

Queda una película escapista, un cine de aventuras bien hecho, rodado con pasión y hecho para que el público disfrute de principio a fin. Lo consigue, y eso es lo que hace (Banda sonora unida) única a "El último mohicano", una película de esas que se echa de menos en un Hollywood actual más centrado en otros menesteres.

Nota: 7
Lo Mejor: La Banda Sonora, preciosa como ella sola, y la emboscada de Magua y los suyos, perfectamente rodada.
Lo Peor: Que en su camino por no extenderse, pierde cierto toque de gloria.