La II Guerra Mundial en el cine (I): "Ser o no ser"

En 1918 acababa la Gran guerra, conflicto que ha tenido ocupado a mi blog durante 2018. Apenas 2 décadas después aquella guerra que iba a acabar con todas las guerras estaba obsoleta. Las tensiones habían ido en aumento y la irrupción de regímenes fascistas, con el nazismo del III Reich como principal estandarte invitaba a pensar que tarde o temprano aquello estallaría.

La adhesión bajo firma de Austria y, poco después, lo ocurrido con Checoslovaquia, invadida pacíficamente sin que ni Gran Bretaña ni Francia movieran un dedo sabiéndose inferiores, estaban siendo los primeros pasos perpetrados por Adolf Hitler. En el mundo del cine podríamos hablar de "El gran dictador" como la gran obra que, aunque hablando de países ficticios, nos narra aquellos primeros movimientos previos a la guerra.




Pero el 1 de septiembre de 1939 algo se movió en Europa. Las tropas de la Alemania nazi invadían Polonia, iniciando así, oficialmente la Segunda Guerra Mundial y, cambiando, el nombre de la que por entonces se conocía como la Gran Guerra. La película escogida para narrar este primer episodio de la guerra en Europa es: "Ser o no ser" de Ernst Lubitsch.

Maestro de la comedia, Lubitsch se metió de lleno en un proyecto sobre la resistencia polaca. De los primeros compases de la guerra, si obviamos los documentales de la Alemania nazi rodados en plena guerra, poco o nada tenemos para conocer aquellos primeros pasos. Sin embargo, en los primeros minutos Lubitsch se nos vuelve dramático para mostrarnos el horror de la guerra.

Lo hace fácil. Tras iniciar el film con planos de diferentes escaparates de comercios o barberias polacas, así como el Teatro, pocos minutos después estallará la guerra y se nos enseña los mismos comercios pero destruidos, en ruinas. Como las vidas de los polacos que ven al enemigo dentro de casa. No se pueden fiar de nadie.


La misión
Como no se puede fiar el joven piloto polaco que combate en la RAF. Poco antes, vemos como mantiene un romance con la gran actiz Maria Tura, mujer del gran, grandísimo actor de teatro Joseph Tura. "Ser o no ser", el verso famoso de Hamlet era aprovechado como mensaje amoroso de los amantes. Ya en Inglaterra durante la guerra, un profesor polaco indica a la escuadrilla de compatriotas suyos que tiene una misión en Polonia y a ver si quieren que lleve algún mensaje.

El joven piloto sospechará de que el Profesor es, en realidad, un agente nazi infiltrado, y tras comunicárselo a sus superiores, estos le envían en una peligrosa misión. Debe volver a Varsovia y avisar a la Resistencia polaca de que no se fíen de profesor, y acabar con él. Y ahí comienzan los enredos en esta disparatada y sensacional comedia de Lubitsch.

Consiguen, montando el teatro, acabar con el profesor, a quien el gran actor Joseph Tura ha de suplantar delante de los nazis. Estos llegan a sospechar y estarán cerca de pillar a Tura, pero con ingenio logra escaparse antes de que llegue el resto de sus compañeros de Teatro a por él. Finalmente deciden montar una gran farsa aprovechando la estancia de Hitler en Varsovia para escapar del país en el avión presidencial y llegar a Gran Bretaña.

Una vez allí, estos héroes polacos conseguirán representar "Hamlet" en el Teatro Nacional en Londres. Ahí, cuando Joseph Tura comienza a entonar la famosa frase que da título a la película un aviador entre el público se levanta de su asiento, para sorpresa de Joseph Tura y del joven piloto polaco, insinuando a ambos que la actriz Maria Tura sigue haciendo de las suyas.

Valoración
Hay una frase que me encanta de esta película. En una de las secuencias un oficial alemán le dice a Joseph Tura, entonces disfrazado como el profesor polaco que él (Tura) había hecho "Con Shakespeare lo que nosotros estamos haciendo con Polonia", grandísima y sutil frase que sirve para hablar por un lado de la barbarie de los invasores alemanes, mientras que por la otra echa más leña al fuego sobre la dudosa capacidad actoral del actor Tura.

Entre eso y el flirteo amoroso, "Ser o no ser" sobresale como una grandísima comedia de enrredos con un par de secuencias o tres dignas de mención. Como el momento en que Tura y el profesor conversan durante el engaño, o como el actor polaco disfrazado del profesor es capaz de mantener engañado al alto mando nazi de la zona. Eso y ese teatro al que va Hitler (¿Idea copiada por Tarantino para "Malditos bastardos"?) en Varsovia sirven como grandes sketches cómicos de la película.

Ya estamos avisados desde esa secuencia inicial donde se ve a Hitler en Varsovia y acto seguido nos muestran un flashback dejando claro que no se trata de Hitler, si no de un actor de la obra de teatro sobre el nazismo que está preparando la compañía de teatro. Por no ofender al buen líder alemán acabarán cancelando la obra y volviendo a realizar "Hamlet" como contraprestación.

Teatro, amor, comedia y la segunda guerra mundial se abren paso en esta gran, grandísima película rodada en plena contienda en los Estados Unidos. El tiempo la ha colocado en su sitio, como una de las mejores comedias de todos los tiempos. Y sirve para hablar de Polonia y de aquel 1 de septiembre del 39 donde comenzó todo. A partir de ahí las tropas de Hitler irían invadiendo otros países como Dinamarca, Holanda o Noruega... hasta que entraron en Francia.

Pero ese momento lo narraremos en el próximo capítulo, dentro de dos lunes.

Valoración: 9 Sensacional comedia con algunos de los mejores momentos de la historia de la comedia en el cine.

Próximo capítulo: La II Guerra Mundial en el cine (II): Dunkerque e Inglaterra