6 días (Toa Fraser, 2017)

6 días es la primera de dos películas sobre el SAS que pude ver recientemente vía plataformas de pago. La película, dirigida por Toa Fraser en 2017, cuenta en su reparto con Jamie Bell ('Billy Elliot') y Mark Strong ('Kingsman'), ambos con presencia en dos títulos sobre trincheras: 'Deathwatch' y '1917' respectivamente. 

Basada en hechos reales, nos cuenta la historia de un ataque terrorista en la Embajada de Irán en Londres, por parte de un grupo rebelde que exige la liberación de prisioneros al Gobierno iraní. Los hechos sucedieron en 1980 y al final de la película, mientras se ven algunas imágenes reales de los altercados, se nos cuenta cómo acabó todo, aunque en el largometraje ya se nos muestre.

La película centra su acción en diferentes escenarios. Los principales son las tensiones dentro de la Embajada, con los terroristas manteniendo sus más y sus menos sobre como actuar, el negociador (Mark Strong) y los cuerpos especiales del ejército británico, los SAS, con Jamie Bell al frente del grupo que actuará (o no) dependiendo de la situación. También se centrará en otras historias, como la de una periodista de la BBC o el despacho donde los diferentes cuerpos (Policía, Ejército...) ponen sobre la mesa como actuar.

Con un montaje efectivo a todas luces, centrando casi cada minuto de metraje en hacer avanzar la trama, el reparto coral cumple su cometido como si de un documental se tratara. El espectador pide que todo pueda saltar por los aires de un momento a otro si bien su título con spoiler invita claramente a pensar en ese sexto día. Sin miramientos, sin regodearse en ninguna escena y sin dar la mínima importancia de más a nadie, la película se mantiene gracias a su corta duración y a que la trama va poco a poco cociéndose en pos del asalto final.

No esperéis cine bélico, pero me ha parecido interesante destacar el aspecto militar de la propuesta, pues al final son los SAS quienes deben actuar, y durante la película veremos los diferentes planes de asalto que van sucediéndose. Desde el intento de asalto a un autobús (por si las negociaciones prosperasen) al asalto a esa fortaleza que sería la embajada, mostrada en diferentes planes. Toca destacar el trabajo minucioso de planificación, visualizando cada planta del edificio o quiénes son los terroristas para que no escapen.

Los hechos de esos 6 días marcarían un antes y un después. Desde entonces, en Gran Bretaña, son los SAS quienes se encargan de actuar en caso de ataque terrorista, tal y como se ve en la ficcionada película disponible en Netflix: 'SAS: Ek ascenso del Cisne Negro'. Es por ello que resulta interesante tratar esta película para hablar de unas fuerzas especiales con cierta fama y que no habían tenido su protagonismo en el blog hasta ahora.

La película es entretenida porque sabe encaminarse hacia un espectáculo corto y casi documental donde el espectador irá descubriendo los principales entresijos de la operación, así como sus problemas. Y aunque sean las charlas telefónicas entre uno de los secuestradores y Mark Strong lo que más se destaca de los primeros 70 minutos, el asalto final merece la espera. Corto, pero directo a la yugular, con la escasa piedad de quienes llevan días calentándose la cabeza esperando ese momento.

Pueden sobrar algunos aspectos de la película. La trama periodística no está muy lograda y queda desdibujada la historia familiar del negociador. Sin embargo, esas conversaciones telefónicas y toda la parte dedicada a las Tropas de Élite británicas logran mantener el ritmo de este thriller de acción que nos vuelve a llevar al siempre presente Oriente Medio. Y eso que en 1980 todavía no había habido ni primera Guerra en Afganistán, ni la del Golfo...

Nota: 6

Lo Mejor: Los preparativos SAS y las conversaciones telefónicas
Lo Peor: que no se la juega en ningún momento. Juega sus cartas con excesiva sobriedad